Contigua a la casa de mi “Chaco Juan”, hoy de los Tenderos anterior, en la antigua calle Donosa, está la original casa de los Delgado de Castilla, con buena portada de piedra y aditamentos laterales de reminiscencias platerescas. Sobre el dintel -en el centro- lleva el escudo familiar, y a ambos lados rosetones con anagramas de Jesús y María.
En esta casa nació, en 1618, el que sería canónigo de la catedral de Jaén, doctor don Pedro García Delgado, que levantó el Santuario de Jesús del Llano y dejó, además de esa maravilla, el Patronato del Santuario de Jesús del Llano, que sobrevivió hasta las desastrosas Desamortizaciones, que le dejaron unas carpetas de escrituras y papeles, por todas las fincas, sin ningún valor.
Vivió Isabelita Parra y tenía una pequeña tienda, con su mostrador de madera, muy rallada del estropajo de esparto, con que se limpiaba.
En la misma calle existen otras casas que merecen destacarse:
La contigua que lleva en el dintel un motivo heráldico con cruz y estrellas, que debió pertenecer al marqués de Jabalquinto, de la familia Benavides. En ella vivió Doña María Sabal, mas arriba Otilia y luego el horno.
Al principio a la derecha, la que fue de la familia de Luis Chapa y en su día también escuela en el bajo, hoy entidad bancaria, por cierto con un anuncio indigno, al estar en la Plaza Mayor de Baños, junto a la iglesia parroquial, y frente al Castillo milenario. En el dintel de la casa existente en la parte alta, hay unas piedras, con el crismón, que sin duda tuvieron que pertenecer a la Parroquia. Mas arriba ya no existe la casa y farmacia de Don Juan Gómez el boticario. Doña Encina, viuda muy joven puso tienda. La casa de D. Juan la visitaba con frecuencia. Yo había vista la televisión por primera vez – en blanco y negro por supuesto- en mi primer viaje a Madrid, camino de Gijón con mi abuela Ana y cuando había corridas televisadas, acudía a verla en casa de D. Juan, con Luisa, su sobrina, muy aficionada.
Al principio a la derecha, la que fue de la familia de Luis Chapa y en su día también escuela en el bajo, hoy entidad bancaria, por cierto con un anuncio indigno, al estar en la Plaza Mayor de Baños, junto a la iglesia parroquial, y frente al Castillo milenario. En el dintel de la casa existente en la parte alta, hay unas piedras, con el crismón, que sin duda tuvieron que pertenecer a la Parroquia. Mas arriba ya no existe la casa y farmacia de Don Juan Gómez el boticario. Doña Encina, viuda muy joven puso tienda. La casa de D. Juan la visitaba con frecuencia. Yo había vista la televisión por primera vez – en blanco y negro por supuesto- en mi primer viaje a Madrid, camino de Gijón con mi abuela Ana y cuando había corridas televisadas, acudía a verla en casa de D. Juan, con Luisa, su sobrina, muy aficionada.
Su casa estaba siempre abierta a todo el mundo y se formaba un buen casinillo. Recuerdo a Doña Dolores, Anita, Encinita y sus hijas Pepita, María Dolores, y María Luisa (mis hermanos pequeños, la llamaban “Manolilla”). Don Juan fumaba “Caldo de Gallina”, paquete azul con letras blancas y los cigarros eran gruesos, liados sin pegar por lo que se le quitaba un trozo y con nuevo papel, se terminaba. En Cuaresma o en los días de Semana Santa, muy serio le dije a María Luisa que los días de Abstinencia, no se tomaba carne, y su abuelo no podía fumar “Caldo de Gallina” Ella muy seria se lo contó y D. Juan riéndose le dijo que yo le estaba tomando el pelo. Y Luisa, con su bata blanca en la Farmacia.
Por encina de la Farmacia, la casa de, mis tíos, los Marqueses de Busianos, con una fachada sobria y muy sencilla, con unas rejas muy puras y escudo de piedra y el portón en el Callejón del Pilar.
Enfrente en la esquina, con el callejón de Luzonas, la casa que fue de la familia Medinilla, no conserva heráldica ni fecha.
[Algunos datos sacados de “Juan Muñoz-Cobo “Baños de la Encina. Un poema de piedra y cal”.1997. Inédito]
Por encina de la Farmacia, la casa de, mis tíos, los Marqueses de Busianos, con una fachada sobria y muy sencilla, con unas rejas muy puras y escudo de piedra y el portón en el Callejón del Pilar.
Enfrente en la esquina, con el callejón de Luzonas, la casa que fue de la familia Medinilla, no conserva heráldica ni fecha.
[Algunos datos sacados de “Juan Muñoz-Cobo “Baños de la Encina. Un poema de piedra y cal”.1997. Inédito]