CANDELERIA CON CRUZ DE ALTAR Y SEIS CANDELABROS A JUEGO DE LA PARROQUIA DE SAN MATEO DE BAÑOS
La Cruz de Altar es la que preside las celebraciones y se coloca en el centro del altar. A ella van todas las miradas de los fieles y el sacerdote, acólitos y asistentes se inclinan ante ella al indicio y al finalizar las ceremonias.
En Baños, la Parroquia de San Mateo guarda un juego magnifico de Cruz de Altar y seis candelabros. La Cruz mide 98 centímetros, es de plata y platino al natural (siempre he oído decir que se añadió platino, de menor precio, para adulterar la plata, ahora de mucho mas valor, hasta tal punto que me contaba mi padre, que ofrecieron un juego igual en plata y una cantidad de dinero, por el juego de Baños, siendo rechazada la oferta) y sobredorada en los adornos. Está marcada en Jaén por Francisco de León y las piezas proceden del taller de Andrés Guzmán, hechas en 1796, según Valdovinos y García López, de etilo neoclásico, introducido por los Borbones, con un regreso a los cánones griegos y romanos.
La Cruz es cuadrada con rebordes y adornos en los brazos faltando el superior, así como las potencias, que hasta no hace muchos años, tenía tres, como se ve en alguna fotografía. Un angelito sostiene la cartela del INRI, en dorado, como lo es también el Cristo crucificado. Arranca la Cruz en una base con ángeles, en una nube, a su vez sobre un soporte para coger, con adornos de guirnaldas, que descansa en el trípode del pie profusamente adornado con ángeles alados en las esquinas, guirnaldas con rosas y otros adornos como palmas entrelazadas, dorados.
Los candeleros son soportes móviles para sostener velas Se conocen, por lo menos, desde la civilización romana y cuando tienen grandes dimensiones o se ramifican en distintos brazos se denominan candelabros. De la época romana pagana se conservan en los Museos Vaticanos dos enormes candeleros marmóreos que se utilizaron para el culto cristiano y de la Edad Media cristiana se guardan no pocos en las iglesias desde el siglo XI hechos de bronce o de hierro y de variadísimas formas y tamaños.
De los ejemplares conocidos según las épocas podemos decir que los del románico (siglos XI al XIII), eran de bronce con pie formado con figuras humanas y de animales. En el gótico (siglos XIV al XVI) de bronce y de hierro en forma d pequeño trípode con alta espiga terminada en un platillo de donde salía una punta para clavar la vela, o un cilindro hueco para el cirio. Ya en siglos posteriores, como es el caso de Baños, también de plata al natural o sobre dorada.
Los seis candelabros siguen el mismo canon que la Cruz, y tiene una medida de 65 centímetros de alto. A raíz del soporte para llevar, se eleva el fuste acanalado, que remata en el platillo que sostiene el cilindro donde ira la vela.
DMC .
La Cruz de Altar es la que preside las celebraciones y se coloca en el centro del altar. A ella van todas las miradas de los fieles y el sacerdote, acólitos y asistentes se inclinan ante ella al indicio y al finalizar las ceremonias.
En Baños, la Parroquia de San Mateo guarda un juego magnifico de Cruz de Altar y seis candelabros. La Cruz mide 98 centímetros, es de plata y platino al natural (siempre he oído decir que se añadió platino, de menor precio, para adulterar la plata, ahora de mucho mas valor, hasta tal punto que me contaba mi padre, que ofrecieron un juego igual en plata y una cantidad de dinero, por el juego de Baños, siendo rechazada la oferta) y sobredorada en los adornos. Está marcada en Jaén por Francisco de León y las piezas proceden del taller de Andrés Guzmán, hechas en 1796, según Valdovinos y García López, de etilo neoclásico, introducido por los Borbones, con un regreso a los cánones griegos y romanos.
La Cruz es cuadrada con rebordes y adornos en los brazos faltando el superior, así como las potencias, que hasta no hace muchos años, tenía tres, como se ve en alguna fotografía. Un angelito sostiene la cartela del INRI, en dorado, como lo es también el Cristo crucificado. Arranca la Cruz en una base con ángeles, en una nube, a su vez sobre un soporte para coger, con adornos de guirnaldas, que descansa en el trípode del pie profusamente adornado con ángeles alados en las esquinas, guirnaldas con rosas y otros adornos como palmas entrelazadas, dorados.
Los candeleros son soportes móviles para sostener velas Se conocen, por lo menos, desde la civilización romana y cuando tienen grandes dimensiones o se ramifican en distintos brazos se denominan candelabros. De la época romana pagana se conservan en los Museos Vaticanos dos enormes candeleros marmóreos que se utilizaron para el culto cristiano y de la Edad Media cristiana se guardan no pocos en las iglesias desde el siglo XI hechos de bronce o de hierro y de variadísimas formas y tamaños.
De los ejemplares conocidos según las épocas podemos decir que los del románico (siglos XI al XIII), eran de bronce con pie formado con figuras humanas y de animales. En el gótico (siglos XIV al XVI) de bronce y de hierro en forma d pequeño trípode con alta espiga terminada en un platillo de donde salía una punta para clavar la vela, o un cilindro hueco para el cirio. Ya en siglos posteriores, como es el caso de Baños, también de plata al natural o sobre dorada.
Los seis candelabros siguen el mismo canon que la Cruz, y tiene una medida de 65 centímetros de alto. A raíz del soporte para llevar, se eleva el fuste acanalado, que remata en el platillo que sostiene el cilindro donde ira la vela.
DMC .
[Juan Muñoz-Cobo".La Orfebreria en la Iglesia Parroquial de San Mateo, de Baños.". BEG.1990.Jaén]