Si, estoy avergonzado, desde que vi esta foto
de Paco Escalante, mancillando, vejando, violando nuestro Castillo Milenario,
nuestro monumento más señero, no he dejado de pensar, de recordar esas piedras que
han visto pasar los siglos y que las manos de unos delincuentes han mancillado.
¡Que graciosos!
La educación nos falta y sin eso, que es misión
de todos con un papel muy importante de la familia, poco podremos avanzar. El
todo vale, el que mas da, el que sean ellos, no nos puede servir.
El oprobio necesita una reparación inmediata
y un desagravio.
DMC