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28 agosto 2011

LA PLAZA MAYOR Y LA DESIDIA CON LAS BANDERAS DEL AYUNTAMIENTO

La Plaza Mayor de Baños de la Encina, pese a la circulación, que es un desastre desde que mentes tan preclaras y previsibles, la modificaran, es bonita, armoniosa y señorial.

La Iglesia Parroquial de una elegancia y porte casi catedralicio, el Castillo milenaria que asoma por encima del Cueto, guardián de todos los tiempos

El Ayuntamiento de una belleza, fuera de lo común, y una armonía, que cautiva con su balcón y tejadillo tan del entorno del renacimiento ubetense.

La piedra, el escudo de España. la rejera.


Y sin embargo, desmerece del entorno, por una falta de cuidado, por una falta de respeto a nuestros símbolos, por mantener días y días esa mamarrachada, de las banderas a media asta, liadas, como unos trapos.

Señores responsables, me vergüenza pasar por la  Plaza Mayor de la Constitución, y encontrarme, como todos los que pasamos, con esa falta de sensibilidad, de sentido. 

¿Que dirán nuestros visitantes? ¿Que imágenes llevaran a sus casas, para enseñar?

Hay cosas que cuestan muy poco, pero son fundamentales, para dar una idea de que somos gentes normales.

DMC

SANTUARIO DEL SANTO CRISTO  DEL LLANO. ANTORCHA PERMANENTE

Estamos celebrando los cincuenta años de la inauguración del Convento de las Hermanas Apostólicas de Cristo Crucificado. Les hablare el día 9 de septiembre, allí en el Santuario, y mi deseo es no aburrirle. Tanta gente me ha dicho que ira a oírme, que espero no defraudarles, pero siempre que pasas por alli, de día o de noche, el Santuario es una antorcha, que ilumina a nuestro pueblo y las monjas llevan 50 años, cuidando y haciendo que la luz brille siempre
DMC 
LA "PLAYA" DEL TAMUJOSO Y LA PUESTA DE SOL

Bajamos la otra tarde a bañarnos; no había mucha gente, algo de viento, pero no molesto, agua clara, cálida y dulce.

Alguna barca de remos y piraguas; niños y manguitos, roscos que se llevaba el viento.

Una familia con su chiringuito montado, pescaban plácidamente. Un ir y venir de gentes del pueblo y forasteros.

Hay sitio para todos, cada uno a lo suyo, refrescarse, tomar sol y nadar, bañarse disfrutas de esta maravilla.

El sol caminaba por la sierra, remiso, no quería dejarnos, rilaba en el agua, y poco a poco, por el erro de enfrente se encaramó y se despedía, pero sin prisa, se escondió y el agua se hizo mas brillante mas clara, mas azulada, amainando el viendo.

Muchos se quedaban a cenar y ya preparaban en la explanada las mesas y las viandas para compartir con los familiares y amigos

Al irnos quedaban los rezagados disfrutando.

DMC