PASEO A LA VERÓNICA

Tuve suerte. Ayer hizo un día muy bueno, con temperatura primaveral, sol agradable, viento suave pero frío.

Saliendo por el Santo Cristo, por encima del Camino de la Virgen; charcos en las hondonadas, pero la carretera esta bastante seca.

La dehesa es algo que muchas veces no valoramos, pero que podemos disfrutar, pasear, aprovechar con las setas, los espárragos y sobre todo recorrer, pero también cuidar.

Da pena el ver los"arroyos" que han formado las motos donde no sale la hierba y se forman correntias con las lluvias y se va descarnando la tierra buena, la tierra fértil.

Dejamos el coche por encima de la Cuesta de los Santos, de la Casería Manrique, y después de afrontar una cuesta, descarnada por las lluvias, seguimos camino por la cerca de lo que era de Rajatelas, la Nava.

Debajo de los pinos es una alfombra, ya se ven saliendo las florecillas, margaritas blancas, amarillas y otras minúsculas  moradas.

Algunas esparragueras, muy miradas, pinillos, acebuches y muchos lentiscos y damos ya cara a la cola, al río Grande. Inmenso, marrón por las lluvias últimas.

La Sierra con mil colores, mil caminos, sinuosos, empinados.

Amplitud,  vista para no olvidar; belleza sin limites, éxtasis, sosiego; quietud.

Uno no quiere seguir, quedarse allí, para no olvidar nada, y olvidarse de todo.

Por la flecha, tómanos la ruta señalada, hacia el yacimiento.

Cartel de La Verónica. No se ve nada

El cartel, con el paso del tiempo, la lluvia, el sol y el viento, lo han deteriorado de tal manera que no se puede leer.

Hay un corral humano, pero no del "hombre primitivo"; alguna construcción mas arriba, y poco mas.  No he visto  restos de excavaciones. 

De momento, merece la pena llegar, el recorrido y  las vistas  que son  impresionantes.

Esta lejos desde Baños, pero señalizado, y es un bonito paseo, donde se pueden ver muchas plantas y arboles, algunas aves y sobre todo disfrutar de nuestro campo, hacer uso de una dehesa del pueblo, nuestra y gozar con la naturaleza.

DMC