Como
todos los años y siguiendo esa tradición belenista de las Islas Canarias, en
uno de los salones, se abre al público uno de los Belenes más visitados, al
estar en pleno centro de la ciudad, en una de las calles más comerciales.
Escenas,
donde podemos ver las calles y atuendos de las gentes a finales del siglo XIX y
principios del XX.
No
faltan detalles en las puertas u balcones, en los corpiños y mandiles.
Diversas vestimentas del diario acontecer, que han ido
quedando como trajes típicos para el folclore
Las
tuneras en los caminos, el camello como animal de trasporte y para la labranza,
por lo enriscado de los campos.
Los típicos
bordados de la tierra y diversos gorros y sombreros.
El Belén,
los Reyes y Pastores, los músicos, el mar de las islas.
Las
cabras y las cantaras de leche, parte del sustento, junto con el queso y el
gofio.
Diversas
escenas que recrean otras épocas y nos recuerdan que la figura central es el
Niño Jesús, que nos ha nacido y que todas las miraras y todos los pasos se dirigen
el Portal.
Feliz
Navidad a todos.
DMC