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01 noviembre 2008

POESIAS DE JUAN MUÑOZ-COBO III.

RETRATO

Tu alma
Es tan pura y cristalina
Como un remanso de agua.

Tu pelo
Tiene destellos de lumbre
Y brilla como el acero.

Tus ojos
son dos imanes potentes
que hacen mirar a tu rostro.

Tus labios
son granates divididos
por unas flores de nardo.

Tus cejas
son puertas que conducen
a un palacio de quimera.

Tu vida
si no me miran tus ojos
acabará con la mía.

Juan Muñoz-Cobo
Baños, 1930.

EL HADA RUBIA

Son tus ojos ensueños de amores
y tus labios sostén de esperanzas
y tus rizos tan rubios y lindos,
mágicos resortes que hacia el cielo arrastran.
Eres flor deliciosa y serena,
mariposa magnifica y blanca,
eres cielo, eres luz, eres vida
porque llenas de amores mi alma.
Yo te quiero con un amor puro,
idealista, fantástico, que habla
sólo de otras regiones etéreas
mas puras, mas bellas y claras que el alba,
regiones de ensueños patéticos, dulces,
de mil ilusiones tranquilas y mágicas,
primavera eterna del vivir nihilista,
corona magnifica de clara esmeralda
¡Si, sábelo, quiero, que lo sepas siempre!
Te quise, te quiero, reina de mi alma,
dulce hada tan rubia que alegras vida,
linda flor más pura que la luna blanca.

Juan Muñoz-Cobo
Baños, 27.05.1930.


ASI ES ELLA
Soneto

Más bonita que todas es mi chiquilla ingrata,
y mas que una criatura de este mundo embustero
parece con su risa de campanas de plata
un “bibelots” precioso o un lindo sonajero.

Es una cosa seria, describirla es pecado,
y pintarla es empeño vano para cualquiera
que no fuera un artista o un genio consumado
capaz de concepciones cerca de la quimera.

Una de esas mujeres que trasforman el seso;
yo diera cualquier cosa por conseguir un beso
de su boca chiquita que es sobrenatural,
y si lo consiguiera, por seguro tendría
que pasaba del mundo prosaico, a la poesía
de un algo mas sublime, de una vida irreal.

Juan Muñoz-Cobo
Baños, Dic. 1930.


¡SI NO ERES GUAPA, PERO …… !

Si no eres guapa, pero yo no se lo que tienes
que cultivan tus ojos y embelesa tu boca,
y enloquece tu pelo negro sobre las sienes
y el corazón se alegra con tu sonrisa loca.

Conozco tus defectos, pero no se me escapa
la gracia de tu risa, tu gesto de alegría,
¡si yo lo se de sobra! No digo que seas guapa,
pero encuentro en tu cuerpo mucha galantería.

No oculto nada de esto, porque es la verdad pura.
quererte… así de veras me digo que te quiera,
pero que te recuerda de continuo este “cura”
eso lo saben hasta los que están en la higuera.

Juan Muñoz-Cobo
Baños.29.10.1932.

SEGUIDILLAS

Las que no me quieren,
ahora me quieren,
porque no comporendieron
y ahora comprenden
que es el cariño
cosa que no entra solo
por los sentidos.

* * *

La quise con locura
y ella me quiso,
pero por se un pobre
llegó el olvido,
pues sin dinero
ni quieren las mujeres
ni baila el perro.

Juan Muñoz-Cobo
Arjonilla, Agosto, 1932




EL TREN

Ya se oye el silbido,
ya se ven los penachos de humo,
el tren ha venido.

Y ya silva sus vagones, a las oleadas de gente me sumo.
ya silva de nuevo al cruzar el túnel, al pasar el puente,
ya cruje la mole de acero chispeante en su desatino,
loco en su carrera, veloz, sorprendente,
conducido por alas de fuego sigue su camino.

Cruje con rugidos y entrañas de acero la locomotora
y arrastra la mole que cruza los valles, la sierra,
su caldera hirviente con ruido que aterra
ensordecedora.
traga los kilómetros, para las ciudades,
caninos desiertos devora,
asemeja un monstruo de inciertas edades.

Es reptil que orada las duras montañas de roca
cubiertos de nieve;
se agita, se mueve
como polvo leve
y arroja huracanes de fuego por su negra boca.

El monstruo de acero desafía los vientos,
no teme a las nubes, en fiera batalla
con los elementos,
deshace las lluvias, los truenos acalla,
destruye
lo que el paso estorba,
y como una hiena que ha matado, huye
mirando su crimen con sus faros rojos de mirada torva;
ya deja gemidos,
un lamento que anuncia la muerte,
los cuerpos sangrantes deshechos sumidos
en el áspero azar de la suerte.

No le espantan rayos,
pueden mucho los nervios de acero de sus mil caballos:
su entraña de fuego,
su correr tan ciego
de centauro brioso,
todo va llevado por la mano,
por la inteligencia del Dios Imponente, Todopoderoso;
y puede Dios mismo
conducir su soberbia al abismo,
hundir su potencia de monstruo en profundo arcano
al cruzar el puente
o tragarlo la tierra en su hirviente
corazón de roca al cruzar el llano.
¡El esfuerzo del hombre es tan vano
frente a la grandeza del Omnipotente! …

Juan Muñoz-Cobo
Arjonilla.2.8.1932


ROMANCE DEL PAJARO VERDE

¡Pobre pajarito verde
el de las alas doradas!
¡Cuánto siento tu desdicha,
pajarito de mi alma!
Te maltrataron los chicos,
y una chicuela tirana,
te ha hecho sufrir sin consuelo
Despiadada.
¡Pobre pajarito, niño
entre los pájaros, habla:
¿Por qué tan pérfidamente
la chicuela te maltrata?

* * *
Ya lloras, pájaro verde,
el de las alas doradas.
En el arbolito lindo
del jardín de la muchacha,
posaste, ¡porqué posaste,
pajarito de mi alma?
¿no me contestas? ¿Por qué
Lloras, pajarito? Habla.
- Lloro, porque quise amar
a la muchachita blanca;
me deje coger por ella
porque creí que ella me amaba.
mi ilusión de pajarito,
era tener una jaula
dorada donde encerrarme
y ser de una niña blanca:
¡Lindo pajarito verde
el de la selva encantada!
manso, apacible, riente
como un remanso de agua;
eras libre, y despreciaste
tu vida libre y diáfana,
por tener cárcel de oro
y ser de un ángel sin alma.

Juan Muñoz-Cobo
Baños, septiembre, 1932


MIRAME

No se que me gusta en ti,
si tu cuerpo, si tu alma,
tus ojos llenos de calma
o tus labios carmesí.
Lo que si se es que te quiero
con todo mi corazón,
que me llenas de ilusión
y que de cariño, muero.
Quiéreme, si es que no quieres
verme morir de amargura,
tu que con los ojos hieres;
y si esas flechas divinas
que me traspasan el alma
son de unos ojos en calma
y se clavan como espinas,
mírame hasta que me muera,
porque la muerte contigo
no la tengo por castigo,
que es dicha imperecedera.

Juan Muñoz-Cobo
Baños. 26.02.1934.