DESDE SANTA MARIA.
BAÑOS DE LE ENCINA
BAÑOS DE LE ENCINA
Fui a dejar el coche, La noche tenia mucho de magia, luna llena, venia de la sierra, el Castillo milenario a la espalda; el ruego, el polígono con sus luces, la carretera general, como siempre la llamamos.
La luna subía, iluminaba todo. Me quede anonadado, por todas partes la belleza era infinita, distinta, sorprendente, otra, pura. Me senté y me puse a meditar. No necesitaba nada mas.
DMC