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24 junio 2009

SAN JUAN DIA DE MI PADRE .

San Juan para mi era y es el día de mi padre, estábamos recién llegados a Baños y se empezaba el largo periodo estival. Ya lo he dicho otras veces, nos mandaban el primer día a casa de Pedro Ortega, a por un sombrero de paja y unas sandalias de goma, de aquellas que te dejaban las marcas negras del sudor y el polvo, pero eran estupendas para la plaza o la huerta y las colas del pantano.
Nosotros no sabíamos de ritos paganos ni de solsticios, pero el 24 de junio, San Juan era en mi casa un día para recordar siempre.
En San Juan se iniciaba el jamón de la matanza de invierno, las brevas, que a mi padre le gustaban con locura, y se le buscaban o guardaban para ese día; era una fiesta en casa todo el día.
Mi madre, con las muchachas, los días anteriores iban preparando cosas: se mataba un cordero, o lo regalaban, no se, y se hacia en adobo, para aperitivo, se encargaba la cerveza a Linares, a Columpios y una arroba de vino blanco (era el que se solía tomar entonces, según recuerdo), para ese día las barras de hielo, hacían montones de empanadillas, rellenas de carne, huevo duro, y como un pisto, al horno que no se ponían duras, ni se “rellovian” y todas esas cosas que se tienen en las casas.
Ya a medio día pasaban los hombres, del Ayuntamiento y del pueblo , a felicitarlo y a tomar el aperitivo, (era años difíciles) esto duraba hasta después de las tres.
Por la tarde las señoras a merendar y por la noche, ya en el patio, matrimonios amigos de Jaén, hasta altas horas de la madrugada.

Un año, creo que desde Arjona, que siempre fueron muy artesanos en la pastelería, le llevaron la tarta de la foto, que pesaba sin exagerar mas de 20 kilos. Tanto nos impacto, sobre todo a los niños, que todo nos sorprendía, que se hizo la foto; tenía varios pisos y me llamó la atención y lo recuerdo la cantidad de peras enteras en dulce que tenía, además de infinidad de cosas. No había neveras, o solo de hielo, que refrescaban, pero no mantenían, y por la tarde estuvimos repartiendo por el vecindario, platos de tarta, para obsequiarlos y que era una lástima que se estropeara con los fuertes calores de Baños.

Para nosotros niños, era un día muy grande, de mucho jaleo de la casa llena a todas horas, era el día de mi padre, el día de Don Juan.
DMC