FERNANDO III, REY Y SANTO. CONQUISTADOR DE BAÑOS
Hoy día 30 de mayo se celebra el día de San Fernando. Gran Rey de Castilla que llevó la Reconquista hasta Sevilla, y conquistó entre otras ciudades las de Baños de la Encina en 1225 el día 21 de septiembre, dia de San Mateo, que incorpora a la Corona de Catilla la villa de Baños, después de serles entregada por el emir de Baeza, Al-Bayysi.
Baños debe al Santo Rey no solo la conquista e incorporación a Castilla, sino extenso término y generosos privilegios.
Hoy día 30 de mayo se celebra el día de San Fernando. Gran Rey de Castilla que llevó la Reconquista hasta Sevilla, y conquistó entre otras ciudades las de Baños de la Encina en 1225 el día 21 de septiembre, dia de San Mateo, que incorpora a la Corona de Catilla la villa de Baños, después de serles entregada por el emir de Baeza, Al-Bayysi.Baños debe al Santo Rey no solo la conquista e incorporación a Castilla, sino extenso término y generosos privilegios.
Baños de la Encina puede estar orgulloso, (dice mi padre en su libro inédito “Baños de la Encina. Un poema de piedra i cal”) con sobrada razón, de su legislación histórica como Concejo. Incorporado a la Corona de Castilla dos años antes que Baeza -tomada el 30 de noviembre de 1227, fiesta de San Andrés-, su conquistador San Fernando otorgó a dicha ciudad fuero propio por el que se gobernase, haciendo varias adaptaciones romanceadas del viejo Fuero latino de Cuenca, que se conserva en la Biblioteca del Arsenal de París y en el Archivo Municipal de la ciudad beaciense, aunque Argote de Molina menciona otra anterior que vio el doctor Benito Arias Montano. Jean Roudil, en su conocido estudio sobre el Fuero de Baeza, editado por la Universidad de la Haya, dice que entre las poblaciones de la primitiva jurisdicción de Baeza que se rigieron por ese ordenamiento, se encontraba Baños de la Encina.
Por lo que nos afecta, en nuestro Archivo Municipal se conservan -recuperados y entregados por mí padre (en una sesión extraordinaria del Ayuntamiento en junio de 1976) tras largos años de inexplicables ausencia - los privilegios otorgados y confirmados a la villa de Baños por diversos monarcas, recogidos en valiosa Carta-Testimonio fechada en Toledo el día 2 de junio de 1561, con cubierta de pergamino grueso y todo el texto en vitela de la época, cuya portada es una verdadera joya digna de un códice, que lleva las Armas de Felipe II con corona y Toisón de Oro formando la letra capitular, así como preciosa orla de oros y colores escasamente deteriorados por la acción del tiempo, en la que aparecen pájaros, flores, insectos y adornos de complicada composición.
Por la primera carta testimoniada, el rey Sancho IV hace referencia a otra del Concejo de Baeza al de Baños otorgándose término privativo "assi como lo apearon e amojonaron nuestros hombres buenos, jueces e alcaldes que enbiamos", a la vez que lo delimita en la extensión que tuvo antes de ser cercenado en la Colonización de Sierra Morena por Carlos III, rey del que Baños no puede guardar buen recuerdo. Añade el Privilegio: "E diemosle por defesa (dehesa) del Concejo toda la Nava Morquí con la Nava Morquiella con todos sus derechos...", que son las dehesas actuales de Yeguas y Morquihuelo.
El documento es claro en cuanto a su fecha y contenido: "Fecho reinante el Rey don Fernando de Castilla (Fernando III), y la Reyna de Castilla doña Juana su mujer e Doña Berenguela Reyna su madre, e don Alfonso su fijo que a de reynar, Señor de Baeça, don Alfonso Señor de Molina. E de esto fueron apeadores e amojonadores y testigos el Juez don Bartolomé, Alcaldes e Domingo Santiago e Diego Alonso e Pero Ruíz de Gorgojí e García Pérez de Vélez e Domingo García Carralejo e Pero Marigil y Martín Pascual que era escribano de Baeça. Facta Carta el año que tomaron Jahen, çinco días andados de junio, era de mill e dozientos e ochenta y quatro", que corresponde -por diferencia de la Era Hispánica usada entonces a la Era Cristiana actual- al año 1246, en que aún vivía San Fernando.
Al pedir merced los vecinos de Baños al rey Don Sancho IV para que les confirmase la Carta que antecede y mandase les fuese guardada como lo fue antes, lo tuvo a bien, ordenando al efecto que nadie entrara en los términos de la villa a labrar, cazar o cortar leñas y que armen losas (trampas para pájaros o "losetas") "asy como lo usaron siempre en tiempo del Rey don Fernando mío abuelo e del Rey don Alonso mío padre" bajo severas penas que establece. Esta confirmación está fechada en Salamanca el 28 de julio de 1287, deduciéndose de su texto que los privilegios arrancan de San Fernando -que tanto hizo por Baños- y fueron confirmados por su hijo Alfonso X el Sabio, abuelo y padre respectivamente de Sancho IV, rey que también concedió a Baños una dehesa de bellota y hierba, cuyo otorgamiento reconocen los privilegios en esta forma:
"Por facer bien y merced al Concejo de Baños, dóles e otórgoles la defesa de bellota y de yerba que an, que les a donado el Rey don Alfonso mío padre, que la ayan defesada (adehesada) de aquí adelante, assí como la ovieron en tiempo del Rey mío padre, según dize la Carta que ellos tienen a esta sazón. E mando e defiendo firmemente que ningunos pastores nin vaquerizos nin otros ningunos non sean osados de entrar nin meter ganados en aquella defesa...". Su fecha también en Salamanca el día 28 de julio de 1287.
Acerca de la calle que tenía dedicada Fernando III el Santo, rey de Castilla y León y conquistador de la villa a la que concedió extenso término y generosos privilegios -calle que se cambió de nombre para darle el de Mestanza, población que ni siquiera pertenece al Santo Reino-, la nobleza y el sentido histórico de Baños deben reparar tal injusticia para que no se nos pueda tachar de desagradecidos. San Fernando vivió y murió durante el siglo XIII y su preclaro nombre no debe quedar afectado por cambios y situaciones políticas, porque los pueblos que olvidan su historia están, irremisiblemente, obligados a repetirla. La incorporación de la Villa a la Corona de Castellana es razón más que suficiente para honrarlo demasiado modestamente, con el nombre de una calle.
Hoy solo queda en Baños, el cuadro del retablo del Altar Mayor del Santuario de Jesús del Llano, ciertamente, muy poco recuerdo, para este Santo, Rey y Conquistador de nuestro pueblo.
DMC
Por lo que nos afecta, en nuestro Archivo Municipal se conservan -recuperados y entregados por mí padre (en una sesión extraordinaria del Ayuntamiento en junio de 1976) tras largos años de inexplicables ausencia - los privilegios otorgados y confirmados a la villa de Baños por diversos monarcas, recogidos en valiosa Carta-Testimonio fechada en Toledo el día 2 de junio de 1561, con cubierta de pergamino grueso y todo el texto en vitela de la época, cuya portada es una verdadera joya digna de un códice, que lleva las Armas de Felipe II con corona y Toisón de Oro formando la letra capitular, así como preciosa orla de oros y colores escasamente deteriorados por la acción del tiempo, en la que aparecen pájaros, flores, insectos y adornos de complicada composición.
Por la primera carta testimoniada, el rey Sancho IV hace referencia a otra del Concejo de Baeza al de Baños otorgándose término privativo "assi como lo apearon e amojonaron nuestros hombres buenos, jueces e alcaldes que enbiamos", a la vez que lo delimita en la extensión que tuvo antes de ser cercenado en la Colonización de Sierra Morena por Carlos III, rey del que Baños no puede guardar buen recuerdo. Añade el Privilegio: "E diemosle por defesa (dehesa) del Concejo toda la Nava Morquí con la Nava Morquiella con todos sus derechos...", que son las dehesas actuales de Yeguas y Morquihuelo.
El documento es claro en cuanto a su fecha y contenido: "Fecho reinante el Rey don Fernando de Castilla (Fernando III), y la Reyna de Castilla doña Juana su mujer e Doña Berenguela Reyna su madre, e don Alfonso su fijo que a de reynar, Señor de Baeça, don Alfonso Señor de Molina. E de esto fueron apeadores e amojonadores y testigos el Juez don Bartolomé, Alcaldes e Domingo Santiago e Diego Alonso e Pero Ruíz de Gorgojí e García Pérez de Vélez e Domingo García Carralejo e Pero Marigil y Martín Pascual que era escribano de Baeça. Facta Carta el año que tomaron Jahen, çinco días andados de junio, era de mill e dozientos e ochenta y quatro", que corresponde -por diferencia de la Era Hispánica usada entonces a la Era Cristiana actual- al año 1246, en que aún vivía San Fernando.
Al pedir merced los vecinos de Baños al rey Don Sancho IV para que les confirmase la Carta que antecede y mandase les fuese guardada como lo fue antes, lo tuvo a bien, ordenando al efecto que nadie entrara en los términos de la villa a labrar, cazar o cortar leñas y que armen losas (trampas para pájaros o "losetas") "asy como lo usaron siempre en tiempo del Rey don Fernando mío abuelo e del Rey don Alonso mío padre" bajo severas penas que establece. Esta confirmación está fechada en Salamanca el 28 de julio de 1287, deduciéndose de su texto que los privilegios arrancan de San Fernando -que tanto hizo por Baños- y fueron confirmados por su hijo Alfonso X el Sabio, abuelo y padre respectivamente de Sancho IV, rey que también concedió a Baños una dehesa de bellota y hierba, cuyo otorgamiento reconocen los privilegios en esta forma:
"Por facer bien y merced al Concejo de Baños, dóles e otórgoles la defesa de bellota y de yerba que an, que les a donado el Rey don Alfonso mío padre, que la ayan defesada (adehesada) de aquí adelante, assí como la ovieron en tiempo del Rey mío padre, según dize la Carta que ellos tienen a esta sazón. E mando e defiendo firmemente que ningunos pastores nin vaquerizos nin otros ningunos non sean osados de entrar nin meter ganados en aquella defesa...". Su fecha también en Salamanca el día 28 de julio de 1287.
Acerca de la calle que tenía dedicada Fernando III el Santo, rey de Castilla y León y conquistador de la villa a la que concedió extenso término y generosos privilegios -calle que se cambió de nombre para darle el de Mestanza, población que ni siquiera pertenece al Santo Reino-, la nobleza y el sentido histórico de Baños deben reparar tal injusticia para que no se nos pueda tachar de desagradecidos. San Fernando vivió y murió durante el siglo XIII y su preclaro nombre no debe quedar afectado por cambios y situaciones políticas, porque los pueblos que olvidan su historia están, irremisiblemente, obligados a repetirla. La incorporación de la Villa a la Corona de Castellana es razón más que suficiente para honrarlo demasiado modestamente, con el nombre de una calle.
Hoy solo queda en Baños, el cuadro del retablo del Altar Mayor del Santuario de Jesús del Llano, ciertamente, muy poco recuerdo, para este Santo, Rey y Conquistador de nuestro pueblo.
DMC
