Siempre que puedo voy a la Sierra. Se pasa el muro del Rumblar; se ve a Baños desde lejos, a Peñalosa, las colas, la isla con el chozo de Palomo, y serpenteando la carretera, se sube Los Llanos.
La carretera esta deteriorada, muchos baches y hay que ir muy despacio.
Ha llovido tanto, que todo esta "enchortala"o y el agua corre por todas partes. Vicente (el rey de la Huerta el Gato), me decía que ahora hay que hablarse en la sierra a voces, por el ruedo del agua.
Pero es una delicia, las piedras del Cerro, contrastan con los verdes; una explosión de verdes y mil colores.
Las reses en sus escondrijos . Los venados desmogando y se sienten avergonzados de verse así: desmochados. Las ciervas a punto de parir. Buen año con la yerba que hay.
Pero la Sierra esta viva y siempre te sorprende.
Un meloncillo que pude fotografiar, un conejo saltarin y las perdices.
Me cruzo y oía cantar, un pequeño vuelo
Luego picoteando, mirando, se sentía dueña y señora, bajo el chaparro
No quería, no tenia prisa en irse. Se disfruta, se goza y se dan gracias a Dios por tanta belleza.
DMC