LLUEVE EN BAÑOS DE LA ENCINA

Estaba programado hoy, según se anunciaba, en el Torreón, un paseo guiado hasta la Pizarrilla. Pero las previsiones del tiempo, ya decían hace días, que la borrasca del Atlántico haría su presencia en Baños.

El domingo ya se veían correr las primeras nubes,  por el cielo y se notaba la temperatura que había subido unos grados.

Por la tarde noche ya llegaron las cataratas, y toda la noche no dejó de llover. Por la mañana, del lunes día 6, se recogían 50 litros en el pluviómetro de casa de mi madre; las calles, las carreteras y los caminos, el Ruedo era una laguna. Por todas partes se oyen las aguas.

Me acerco al Embalse; todos los arroyos por chicos que sean, van desbordados; desde el muro se nota mas agua, por Los Llanos, la carretera es un charco continuo.

La erosión, con estos suelos sin nada, descarna y descarna el suelo.

El arroyo de la Piñuela es un espectáculo, y baja con agua colorada, arrastrando cuento se pone en su camino, y el de Andújar, casi tapa los ojos del puentecillo.

Llueve a ratos y el ambiente es húmedo, el campo maravilloso, la sierra una delicia.

Con este tiempo tan cálido, ya están saliendo las florecillas, y el pasto de mil tonos verdes, esw un relajante para la vista, y agradable para el cuerpo y para el alma.

Como siempre y por donde uno camine, Baños es una sorpresa y una belleza.

DMC