SE IBA LA TARDE POCO A POCO  POR   LA SIERRA

Baños, por donde lo mires, es un mar de sorpresas; la mayoría buenas, algunas mejor no hablar de ellas ahora.

Los Ruedos por levante y la Sierra, nuestra Sierra Morena por el poniente.

Todos los días son distintos y Dios no se repite y nos regala unas puestas del Sol maravillosas.

Desde el chalet la tarde se iba marchando, se iba alejando sobre el Navalmorquí.

Al no haber ni una nube el sol, no nos dejo esos rayos, esos reflejos maravillosos, en las despedidas.

Solo quedaba la luna, muy pálida, en creciente, y el perfil de la sierra, las parras, los pinos, el pantano, la grandeza de nuestro paisaje.

La belleza mas sorprendente.

DMC