La Plaza de la Constitución
Bajando por la calle Santa María, se llega a la Plaza de la Constitución o Plaza Mayor. Recuerdo de pequeño a la plaza de tierra y por la mañana, al menos en verano, se ponían los puestos del mercado. Acudían los hortelanos a vender sus frutas y verduras frescas.
Nosotros los niños jugábamos a la pita, a pidola, a las bolas, al escondite, al trompo, o las chapas y a todo lo que se nos iba ocurriendo. Cuando llovía, al correr el agua, dejaba al descubierto piedras que contenían plomo y brillaba azulado al sol. Allí en la Feria y en los Esclavos se instalaban las “barcas” y las casetas del turrón.
En el año 1952 se arregla y se ponen los jardines, una farola central y ya en 1954 el Monumento a nuestra Patrona la Virgen de la Encina. El tráfico, que poco a poco, se va incrementando, se regula muy bien.
Luego queda como está, pero hay que cuidarla. Las fuentes llevan varios años estropeadas y ya a los brocales les faltan remates. La fuente de beber, que se hizo por la Escuelas Taller, es una autentica pena, por no decir palabras mas fuertes y se le va a caer a un niño cualquier día y puede dar un serio disgusto. La del Monumento, le pasa igual, ver como se van deteriorando las cosas y se van dejando a que terminen por el suelo A mi no me gusta. Para el tráfico un lío y para los bailes en las Fiestas del Emigrante, es imposible, pues queda un espacio muy pequeño e incomodo. Pero doctores…
Quizás sea la única plaza mayor en el mundo, bueno al menos en toda España, que no tenga un Bar, y todo el que llega lo pregunta.
La Plaza con el Ayuntamiento y la Iglesia Parroquial de San Mateo, que fue el centro neurálgico de Baños hasta hace unos años, hoy es un lugar solitario y desierto. El pueblo se ha desplazado, a la parte alta, pero es lo primero que ven nuestros visitantes y debemos siempre dar una buena imagen.
DMC.
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